Un aspecto importante a considerar al comprar electrodomésticos para una cocina profesional es su facilidad de limpieza. Limpiar una licuadora no solo es higiénico, sino que también evita que los sabores de los alimentos se mezclen entre diferentes platos. El vaso mezclador y la tapa se pueden desmontar y limpiar con un poco de agua jabonosa. Una opción aún más sencilla es llenar el vaso hasta tres cuartos con agua caliente y un poco de detergente líquido y encenderlo. Esto la limpiará rápida y eficazmente. Al terminar, séquela con un paño suave y la licuadora estará lista para la siguiente tarea.
